Qué piezas de los vehículos robados son los más buscados por los deshuesaderos

Desafortunadamente en Costa Rica, como en cualquier otra parte del mundo, los vehículos son objetos del hampa, pero los conductores de esos vehículos desconocen cuál es el negocio que hay detrás de los robos.

Es lamentable saber que los vehículos quedan prácticamente desarmados y ofrecidos en deshuesaderos o chatarreras y al final lo que venden sos piezas robadas.

De ahí la importancia de que los usuarios cuiden sus autos y no se expongan a estos robos.

¿Cuál es el negocio de las piezas de los autos robados?

En Costa Rica los autos suelen ser robados para venderlos en chatarreras o deshuesaderos porque este mercado facilita que los delincuentes obtengan dinero rápido y con menos riesgo de ser detectados.

Cuando un vehículo es desarmado, sus piezas se venden por separado y es mucho más difícil rastrearlas o vincularlas con un carro robado.

Además, muchas piezas tienen alta demanda, especialmente motores, transmisiones, puertas y computadoras,, lo que hace que los ladrones obtengan ganancias sin necesidad de vender el carro completo.

Otro motivo es que algunos delincuentes aprovechan fallas de regulación o controles débiles en ciertos deshuesaderos, donde se compran piezas sin verificar adecuadamente su origen.

Esto crea un mercado clandestino que incentiva el robo de autos, pues las partes se pueden mezclar entre inventarios legales y pasar desapercibidas.

También influye que muchos autos más antiguos tienen piezas costosas o difíciles de encontrar, lo que hace atractiva su desarticulación para la reventa. En conjunto, la combinación de alta demanda, poca trazabilidad y ganancias rápidas alimenta este tipo de delito.

¿Cuáles son las piezas de los autos robados que más apetecen a las chatarreras?

Las piezas que más buscan las chatarreras (legales e ilegales) de autos robados suelen ser aquellas carísimas, fáciles de revender y con alta demanda por fallas frecuentes o desgaste natural. Entre las más apetecidas están:

Componentes mecánicos de alto valor

• Motor completo o partes del motor (alternador, arranque, bobinas, bomba de combustible).
• Transmisión (automática o manual).
• ECU / Computadora del vehículo.
• Sistema de inyección y sensores.

Partes de carrocería

• Puertas, tapas de baúl, capós.
• Parachoques, guardabarros.
• Espejos laterales (muy robados por su fácil extracción).
• Faros y stops (especialmente en modelos cuyos repuestos son caros).

Sistema de suspensión y frenos

• Amortiguadores.
• Manguetas, brazos de control.
• Discos y calipers de freno.

Partes interiores

• Volantes, bolsas de aire (airbags).
• Pantallas multimedia.
• Módulos electrónicos interiores.
• Asientos, especialmente los de cuero.

Rines y llantas

Son fáciles de vender y tienen muy buena salida en el mercado de segunda mano.

En el caso de los autos que no se desarman por completo, los delincuentes dependen de falsificación documental y manipulaciones superficiales, como alterar números visibles o colocar placas falsas, con el fin de que el vehículo parezca legítimo en un primer vistazo.

No obstante, estas prácticas suelen ser detectables por revisiones técnicas o policiales rigurosas, por lo que representan un riesgo mayor para ellos; por eso, la mayoría opta por desarmar los autos.

En resumen, lo que permite que un vehículo robado pase desapercibido es principalmente que deja de ser un vehículo y se convierte en partes que, por sí mismas, parecen repuestos comunes.

Para leer más información sobre este tema le recomendamos también la nota: Qué autos son los más buscados por los ladrones en Costa Rica.