Por qué darle mantenimiento al chasis de un vehículo

El poder conducir un auto quizás nos simplifica muchas cosas, pero quizás no lo valoramos suficiente y nos empezamos a quejar cuando ya no funciona como lo esperamos.

Y esto se debe más que todo al problema de mantenimiento del vehículo, creemos que es solo encenderlo o ir a la estación a llenarle el tanque.

Hay partes del auto que son importantes, pero hay una que no le prestamos la atención requerida: se trata del chasis.

¿Qué es el chasis de un vehículo?

El chasis es la estructura que le da soporte al vehículo, es decir la que sostiene las piezas que forman el auto, es como un esqueleto, aporta sostén y rigidez.

En ocasiones se presenta la confusión de conceptos y se cree que el término carrocería es lo mismo que chasis, lo cual no es correcto.

La diferencia se encuentra en que la carrocería es la que se encarga de darle apariencia al vehículo mientras que el chasis es la estructura interna que forma el vehículo.

¿Cuál es la función del chasis?

La función radica en conectar las cuatro ruedas y el sistema de dirección del vehículo. En ella carga toda la masa del automotor, recibe todas las cargas y esfuerzos del mismo.

También cumple con una función de seguridad porque como todo está unido y sujetado a la estructura hace que las personas viajen más a gusto. Todo esto lo que evita es que tras los impactos del vehículo en carretera se presente deformación de las piezas mecánicas.

Para el diseño de un chasis se toma en cuenta el peso, rigidez para soportar cantidades de fuerza, resistencia y sencillez.

¿Por qué es importante darle mantenimiento al chasis?

Así como las piezas mecánicas presentan fallos con el pasar del tiempo el chasis puede ser un dolor de cabeza para el dueño de un vehículo, pues cuando no hay mantenimiento se empieza a ver afectado el frenado, la dirección, desgaste en las llantas, entre otros.

Este mantenimiento no se trata de llevarlo solo a lavar en un tiempo prudencial si no de darle una chequeada antes de salir a carretera. Para ello tome en cuenta:

• Hay que fijarse más que todo en la parte de abajo del auto si hay rajaduras, fisuras de cualquier tipo, porque eso puede hacerle perder estabilidad al vehículo.
• No estaría de más que en algún momento se realice una medición de altura para detectar más rápido problemas en los resortes y suspensión del vehículo.
• Hay que estar atentos dónde se mete el vehículo, pues si está expuesto a mucho polvo, viento, sol, arena, esto puede provocar que llegue el óxido a hacer daño. Lo peor es que esto se extiende luego a otras partes del auto.
• En las zonas de alta temperatura como las costas suele el vehículo sufrir más en su chasis.
• Si con el pasar de los días aumenta la presencia de polvo, barro, suciedad y óxido hay que lavarlo a presión. Si se lleva a un lugar especializado podría pedir que se lo engrasen.

¿Cada cuánto hay que lavar el chasis?

Bueno esto va a depender primero del tipo de vehículo y de las salidas que tenga. El deterioro por ejemplo se presenta mucho en los vehículos pesados que recorren largas distancias que un carro liviano de ciudad. 

Por eso es importante primero una revisión del chasis para luego optar si es necesario o no en ese momento el lavado.

La recomendación es que si el auto pasa mucho en zonas de suciedad, polvo, etc es mejor lavarlo por lo menos tres veces al año.

Ahora bien si no se encuentra una suciedad notable tampoco es bueno echarle agua constantemente porque la humedad podría hacer de las suyas más adelante.

Así como el chasis podría lavar por qué no el motor del vehículo. Para más información ingrese aquí.