Cómo diferenciar el leasing del renting de vehículos

Leasing y Renting se convierten en dos palabras ya muy conocidas en el negocio de adquisición de vehículos y no solo para empresarios que trabajan en el traslado y venta de mercancías y productos sino también para los trabajadores independientes.

Pero quizás no conocen cuál es la diferencia entre ambos y los beneficios que tienen al adquirirlos. Hay empresas que se dedican tanto al leasing como al renting de vehículos en Costa Rica.

Diferencias entre el leasing y renting

Ambos son una buena opción para las personas que desean por ejemplo convertir su auto en un gasto y no en un activo, las dos modalidades funcionan igual en ese sentido de ser deducibles de la renta.

La diferencia radica más que todo en el modo de brindar el servicio y en algunos elementos que incluye el leasing que no los tiene el renting.

El leasing

Es una figura de financimiento en la que el usuario junto a la empresa encargada del servicio firman un contrato, en el que se genera un alquiler del vehículo e incluye una opción de compra al final del plazo del mismo en caso de que la persona desee dejarse el vehículo. O bien podría pedir una extensión del contrato.

El contrato es de 2 años y se puede extender como máximo unos 8 años. La cuota se cancela mensualmente y la persona que tiene el vehículo se hace cargo del proceso de mantenimiento.

Lo que incluye el leasing en la mensualidad es el seguro del vehículo y el impuesto al Valor Agregado.

Una ventaja es que al no haber una compra directa la capacidad de endeudamiento del usuario se mantiene al 100 por ciento libre.

La cuota puede variar por la fluctuación del mercado de acuerdo a los intereses. 

Económicamente la mensualidad es mucho menor que la del renting.

El renting

El renting es conocido también por muchos como leasing operativo, la diferencia es que el contrato de alquiler hace que la empresa que ofrece el servicio se haga cargo de todos los gastos de mantenimiento del vehículo.

No hay un financiamiento de por medio de una entidad bancaria como en el leasing, acá el usuario nunca será dueño del vehículo. Pero, se puede pedir cambio o renovación del mismo durante el proceso de vigencia del contrato.

El contrato del renting va desde 1 a 5 años.

El contrato del renting, suele establecerse en períodos que van de 1 a 5 años. Una vez que ese plazo finaliza, el arrendatario debe devolver el bien que ha alquilado.

La cuota del renting incluye: pago de marchamo, seguros básicos, revisión técnica, mantenimientos preventivos y asistencia en carretera.

Ajuste de necesidades

Las dos modalidades tienen sus beneficios, todo dependerá de lo que realmente la persona o una empresa requiera para su negocio.

Para ello es importante analizar panoramas financieros, qué sale mejor a plazo, si el renting o el leasing y por supuesto ver las opciones que ofrecen las entidades que se encargan de hacerlo realidad en el mercado.

También hay que analizar el tipo de vehículo que necesita para realizar un trabajo óptimo, modelo, rendimiento de motor, espacio, todo esto sin duda repercutirá en el precio final de cualquiera de las dos modalidades.

Lo cierto del caso es que tanto leasing como renting se han convertido en opciones atractivas por los constantes cambios e impactos en el bolsillo de las personas sobre la adquisición de vehículos, que desafortunadamente sea deprecian muy rápido.

El pensamiento empresarial y de algunos trabajadores independientes es que si el vehículo se usa para trabajar y se requiere tener un escudo fiscal la mejor opción es obtener un arrendamiento de cualquiera de los dos tipos.